Estos humedales son una pieza fundamental del ecosistema de La Mancha. Muy bien protegidos, albergan una importante fauna, en especial, es una parada obligada para muchas aves migratorias.
Y tal vez sorprende para los amantes de la flora. Sobre todo lo que se puede ver, destaca un increible bosque de Tarays. Merece la pena una detenida visita.